La Hermandad de las Flores

A todos los corazones que laten en unidad perfecta con la creación infinita...
Para todas las Mujeres de Milagros que nos unimos en una Hermandad de sabiduría para despertar a la Mente Pura a través de la inteligencia innata del corazón!
Bienvenidas y bienvenidos!!!



El jardín encantado

El jardín encantado
Este es un espacio para difundir los principios espirituales y filosoficos de Edwuard Bach y de Un Curso de Milagros. También por este medio es mi intención compartir la nueva medicina que despierta a la Mente Pura en el espacio sagrado de tu corazón:Milagros El Sendero de la Belleza.

martes, 28 de junio de 2011

Resurrección.

Este mensaje recibió Helen el 2 de octubre de 1976 después de preguntar a Jesús, aquí la pegunta y la respuesta de Jesús

¿Hubo una resurrección física?                    


Mi cuerpo desapareció porque ya no tenía ilusiones sobre el mismo. La última de éstas se había extinguido. Lo depositaron en una tumba, pero no quedaba nada para sepultar. No se desintegró porque lo irreal no puede morir. Simplemente se convirtió en lo que siempre fue.(nada) Eso es lo que significa el “rodar la piedra”. El cuerpo desaparece, y ya no oculta más lo que yace más allá. Simplemente deja de interferir con la visión. Rodar la piedra es ver más allá de la tumba, más allá de la muerte, y entender que el cuerpo no es nada. Lo que se entiende que no es nada tiene que desaparecer.


Yo sí asumí una forma humana con atributos humanos posteriormente, para hablarles a aquellos que habrían de probarle al mundo la falta de valor del cuerpo. Este había sido mal interpretado. Vine a decirles que la muerte es ilusión, y que la mente que fabricó al cuerpo puede fabricar otra puesto que la forma de por sí es una ilusión. Ellos no lo entendieron. Pero ahora te hablo a ti y te doy el mismo mensaje. La muerte de una ilusión no significa nada. Desaparece cuando despiertas y decides no soñar más. Y aún tienes el poder de tomar esta decisión como lo hice yo.


Dios le extiende la mano a su Hijo para ayudarle a resucitar y a que regrese a El. Yo puedo ayudar porque el mundo es una ilusión, y yo he transcendido el mundo. Mira más allá de la tumba, del cuerpo, de la ilusión. No tengas fe en nada excepto en el espíritu y en la orientación que Dios te da. El no pudo haber creado el cuerpo puesto que este es un límite. Tiene que haber creado el espíritu porque este es inmortal. ¿Pueden estar limitados aquellos que han sido creados por El? El cuerpo es el símbolo del mundo. Déjalo atrás. El cuerpo no puede entrar en el Cielo. Pero yo puedo llevarte allá en el momento que tú lo decidas. Juntos podemos observar al mundo desaparecer y a su símbolo desvanecerse conforme este lo hace. Y entonces, y entonces……no puedo hablar de eso.


El cuerpo no puede quedarse sin la ilusión, y la última que se ha de superar es la muerte. Este es el mensaje de la crucifixión: No hay orden de dificultad en los milagros. Este es el mensaje de la resurrección: Las ilusiones son ilusiones. La verdad es verdadera. Las ilusiones se desvanecen. Sólo la verdad permanece.


Estas lecciones necesitaban que se enseñasen sólo una vez, pues cuando la piedra de la muerte se rueda, ¿qué otra cosa puede verse sino una tumba vacía? Y eso es lo que ve el que me sigue rumbo a la luz del sol y se aparta de la muerte, trasciende todas las ilusiones, sigue adelante hacia el portal del Cielo, donde Dios mismo vendrá a llevarte a casa.


( Del libro de Kenneth Wapnick Ausencia de Felicidad (La historia de Helen Schucman, la escriba de Un Curso de Milagros))